¡Tengo un blog!

Haciendo unas búsquedas en Google me he topado con este blog. He leído varios párrafos y he empezado a recordar: Esto me suena... el tipo que escribe parece tener bastante en común conmigo... Vaya, creo que esto lo escribí yo... ¡Tengo un blog!

Evidentemente es broma. Recordaba que tenía un blog porque lo tengo apuntado en mi agregador bajo el título “mio”.

Lo cierto es que llevo un montón de tiempo sin escribir nada aquí. Nunca fui muy regular escribiendo, pero últimamente lo tenía abandonado del todo. Sabía que esto ocurriría, que yo no soy como esos blogger legendarios que mantienen su periodicidad diaria desde el principio de los tiempos, cuando Dios creó la Web 2.0 y el RSS. Pero como a mi me lee muy poca gente, no importa demasiado que deje de escribir durante más o menos tiempo. Cuando me suscribí a Blogger tenía intención de escribir casi a diario, contar muchas cosas, llegar a mucha gente y hacer que el mundo sea un lugar mejor gracias a mi prosa. Pero ya he visto que eso no va a ocurrir nunca. La constancia no es mi fuerte y tengo cada vez menos tiempo para cambiar el mundo.

Últimamente mi trabajo es bastante más, digamos, intenso de lo habitual. Tengo demasiadas cosas en las que pensar durante todo el día. Muchos días llego a casa a las tantas y con ganas de irme a la cama cuanto antes. Otras veces me cuesta desconectar y sigo trabajando en casa. Supongo que es el mal común a todos los que algún día decidieron montar una empresa. Pero mi caso debe ser especialmente grave, porque mi trabajo es una prolongación de mis aficiones. Por eso, a pesar de todo, no me considero un adicto al trabajo, sino un apasionado de la electrónica y del software (un friki, que se dice ahora) que, de paso, se gana el pan con ello. Así que, en realidad, no puedo quejarme.

Pero incluso con tanto trabajo estas últimas semanas he sentido varias veces el gusanillo de volver a escribir algo. También he encontrado algo de tiempo para retomar algunos proyectos personales que tenía pendientes. Hablaré aquí sobre algunos de ellos.

¡Hay que ver cómo ha degenerado este blog! Empezó con artículos divulgativos largos y bastante trabajados, y míralo ahora, actualizándose de pascuas en ramos para contar lo primero que se me pasa por la cabeza.